Nuestro estado de ánimo suele bajar cuando afrontamos una situación estresante, pero la alimentación cumple un papel importante en cambiarlo. Una alimentación saludable y equilibrada nos brinda nutrientes que mejoran nuestro estado de ánimo, nuestro bienestar físico y mental. Pero, la alimentación no es lo único, sino mantener una vida saludable.
¿Qué es el estado de ánimo?
Es un estado de ánimo representa el sentir de la persona y estas pueden ser positivas, negativas, agradables o desagradables. Se caracterizan porque suelen ser prolongadas, es decir, pueden durar minutos, horas, semanas, días, etc. Son causadas por factores diferentes a lo emocional, como el estado físico de la persona, el estado psíquico u otros factores que influyen de forma positiva o negativa en el estado de ánimo.
El estado de ánimo tiene sensaciones difusas y se muestra de manera poco intensa. Por ello, se puede controlar de forma más rápida comparación del control de las emociones.
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Vitaminas estimulantes en el estado de ánimo
A continuación, te recomendaremos algunas vitaminas esenciales que contribuyen al cambio del estado de ánimo:
1.- Vitamina B 12: Es fundamental para la salud de las neuronas y la sangre, la transmisión de los mensajes nerviosos desde el cerebro a otras zonas del cuerpo. También se encarga de la producción del ADN y la conservación de los glóbulos rojos.
Debido a eso, esta vitamina, está relacionada con el deterioro cognitivo o el incremento de padecer depresión. Si tuviera una deficiencia tendríamos síntomas parecidos a la demencia. Lo encontramos en pescados, carnes, huevos, leche, carne magra, cereales fortificados, entre otros.
2.- Vitamina D: Es esencial, porque regula los neurotransmisores relacionados con el estado de ánimo, pero se suele pasar por alto. También regula el sistema inmune, favorece la transformación de los monocitos en macrófagos y nivela los niveles de calcio y fosfato.
Tener una deficiencia de esta vitamina en el organismo, nos hace más propensos de padecer el alzhéimer, el trastorno del espectro autista (TEA) o la psicosis. Lo encontramos en pescados azules grasos como el atún, caballa y salmón, productos lácteos, hígado de res y a través de la exposición del sol.
3.- Vitamina B3: La niacina o vitamina B3, se encarga de la producción del colesterol bueno y la grasa que nuestro organismo requiere. Aunque el cuerpo lo produce tambien lo encontramos en suplementos. Esta vitamina es un aminoácido liberado al digerirse las proteínas y también participa en las síntesis de algunas hormonas. Lo puedes encontrar en el pollo, el tomate, el brócoli, el plátano y las legumbres.
4.- Omega 3: Los omega-3 son grasas poliinsaturadas, que tienen mayor potencial de beneficiar a las personas que padecen de un trastorno del estado ánimo, como depresión y ansiedad. Si hubiera una deficiencia en nuestro organismo alteraría el rendimiento mental y nuestro estado de ánimo. Los puedes encontrar en los pescados, los mariscos, las nueces, las semillas (la linaza, las semillas de Chía y las nueces).
5.- Magnesio: Se encarga que las funciones de los nervios y los músculos sean normales, también ayuda a apaciguar al sistema nervioso, reduciendo la sensación de estrés y ansiedad. Si existe una deficiencia en nuestro organismo, es probable sentirse fatigado, tener calambres musculares o incluso el estreñimiento. Lo encuentras en cereales integrales, las nueces, legumbres y las semillas.
6.- Zinc: El zinc es un elemento fundamental para el sistema inmunológico, debido a que se desempeña en los neurotransmisores que controlan nuestra función mental y las funciones cognitivas, también puede mejorar el estado de ánimo.
Si hubiera una deficiencia en nuestro organismo, somos más propensos a los estados depresivos y los comportamientos relacionados con la ansiedad. Lo encuentras en los mariscos, aves, pescados, las carnes rojas, los frutos secos y legumbres.
7.- Ashwagandha: Esta planta nos ayuda a estimular las sensaciones de tranquilidad y aminora el estrés. También mantiene en armonía el sistema suprarrenal, combate el cansancio, incrementa los niveles de energía y modera los niveles de la hormona del estrés, que es el cortisol. Posee propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que fortalecen al sistema inmune.
El estado de ánimo puede mejorar por el consumo de ciertos alimentos, la actividad física y realizar pasatiempos o actividades que nos agradan. Es recomendable no automedicarse y consultar con un médico especialista.
