Con el paso del tiempo las rutinas de los cuidados de la piel han ido cambiando, se han personalizado para cada tipo de piel. Uno de los productos más empleados es el sérum facial. Aunque en un inicio solamente se empleaba como un producto antiedad, en la actualidad suele ser empleado por las mujeres de distintas edades dentro de su rutina de belleza.
¿Qué son los sérum facial?
El sérum facial es un producto con una concentración doble de activos a comparación de las cremas hidratantes. Una mayor concentración de bioelementos, compuestos antiedad, antioxidantes, antimanchas, energizantes, entre otros. Posee una textura ligera que penetra con mayor facilidad en la piel.
Al emplearlo, puedes realizarlo en capas y así combatir distintas necesidades de la piel. Su aplicación es sencilla, primero llevamos a cabo una limpieza de la piel, puede ser leches o aceites limpiadores. Luego aplicamos el sérum de nuestra preferencia, unas 4 o 5 gotas en el rostro, cuello y escote. Después, se aplica el tónico fácil y finalmente la crema hidratante, que actúa como una selladora.
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¿Cuáles son sus beneficios del sérum facial?
Los beneficios que genera el sérum facial en la piel, son amplios. A continuación, te mencionamos los más comunes:
- Se complementan con otros tratamientos: Los sérums se complementan con otras cremas que empleamos en nuestra rutina. Un ejemplo, empleas el sérum hidratante con otra crema antimanchas.
- Beneficia el uso de otras cremas: El acabado que deja el sérum en nuestra piel, favorece la aplicación de las otras cremas de la rutina, como el bloqueador, la base, entre otros.
- Favorece su penetración: Su componente ligero favorece la penetración hasta las capas más profundas de la piel a comparación de otros productos.
- Es fácil de absorber: Nuestra piel lo absorbe rápidamente, dejándola suave sin la sensación de oleosidad. Es perfecta para las personas con la piel grasa.
¿Cuál es el ideal para tu rutina de belleza?
Aún existe falta de conocimiento sobre como escoger el sérum y algunas personas consideran que es por el tipo de piel, debido a que nuestros productos de la rutina son elegidos de esa manera. Pero lo sérum actúan diferente, puesto que penetran a capas muy profundas de la piel y no solamente en epidermis como otras cremas.
En resumen, el sérum debes realizarlo por la edad de tu piel y no por el tipo de piel. La edad de nuestra piel va a depender por los cuidados que tenemos con el paso del tiempo, si empleamos el bloqueador, una alimentación saludable y una buena rutina de cuidado de la piel. Existe una escala general, que puedes emplear para escoger el compuesto adecuado. A continuación, te presentamos los productos:
- Rutina para las mujeres de 20 años a más: El compuesto más recomendado es el ácido hialurónico, el cual hidrata a profundidad nuestra piel y previene la aparición de arrugas.
- Rutina partir de los 30 años a más: A esta edad la producción de colágeno se reduce, por ello los sérum con vitamina C, son los más adecuados. Puesto que se encargan de combatir las líneas de expresión futuras o actuales.
- Rutina para los 30 – 40 años a más: La vitamina A o también llamada retinol, se encarga de renovar las células del rostro, por ello es el compuesto apropiado para esta etapa. Otra opción vegana es el Bakuchiol, un compuesto que ha ganado popularidad entre los dermatólogos.
- Rutina de los 50 años a más: En esta edad nuestros sérum deben contener DMAE, dietilaminoetanol, un compuesto que favorece la reafirmación y tensado de la piel.
- Rutina de los 60 años a más: A esta edad ya avanzada, las cantidades de colágeno en la piel se redujeron notablemente y se busca compuestos que estimulan la segregación del colágeno y la elastina.
Es importante siempre emplear el sérum en nuestra rutina de cuidados de la piel y no sustituirlo por otro producto. Estas cremas se usan antes de las cremas hidratantes.
