La miel: ¿Qué propiedades tiene para el sistema digestivo?

La miel: ¿Qué propiedades tiene para el sistema digestivo?

NUTRICIÓN

La miel es un producto que posee múltiples beneficios para el organismo, como ser una fuente de energía y brindarnos nutrientes. Además, se utiliza en distintas áreas, como la cocina o la medicina. Su consumo se remonta a la época de Hipócrates, en donde lo empleaba para combatir las afecciones de la piel y curar heridas de la piel.

¿Qué es la miel?

La miel es un producto natural que se obtiene a través de las abejas. Contiene muchas vitaminas, minerales, proteínas, antioxidantes, entre otros elementos. Esto ayuda a mejorar la digestión, aliviar infecciones, estreñimientos, exceso de acidez y enterocolitis. También, es usado como edulcorante natural, reemplazando al azúcar convencional. Otras propiedades que posee son las antibacterianas, en donde combate a las bacterias y virus. Además disminuye los síntomas relacionados con la gripe.

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Propiedades de la miel para el sistema digestivo

Las propiedades más importantes de la miel son las siguientes::

  • Disminuye los niveles de la acidez estomacal: Reduce la acidez estomacal y los síntomas del reflujo gástrico. Poseen antioxidantes que combaten a los radicales libres, los causantes del reflujo gástrico debido a la muerte de las células en el tracto digestivo.
  • Combate el estreñimiento: La miel posee un alto nivel de fructooligosacáridos (FOS), que actúan en el colon como una fibra vegetal. Es decir, absorben el agua incrementando el volumen de las heces y forman gases que aumentan la movilidad intestinal o el peristaltismo. Por lo tanto, actúan como un laxante. Además, son la comida de las bacterias de la flora intestinal, que se encargan de la fermentación y putrefacción.
  • Evita las infecciones estomacales: La miel de Manuka es usada como remedio natural, porque contiene peróxido de hidrógeno y la proteína defensina-1, que actúan como agentes antibacterianos. También, elimina a las bacterias causantes de las infecciones estomacales que pueden ocasionar el intestino irritable o la enfermedad de Crohn.
  • Equilibra la flora intestinal: La flora intestinal facilita el proceso de la digestión y los procesos metabólicos del organismo, por ello es importante que se encuentre en equilibrio. También, posee oligosacáridos que fomentan los efectos prebióticos, estos estimulan la producción de ácidos grasos de cadenas cortas.
  • Mejora el proceso digestivo: Las enzimas de la miel actúan como catalizadoras en la digestión, descomponiendo los carbohidratos y azúcares. También, disminuyen el riesgo de padecer trastornos digestivos debido a que aligeran este proceso. Si incluyes la miel a tu alimentación, consulta con un doctor para aprovecharlo al máximo.
  • Reduce el colesterol: Los componentes de la miel favorecen en la disminución de los niveles del colesterol malo (LDL) e incrementan el colesterol bueno (HDL).
  • Reduce los triglicéridos: Al ser utilizado como un sustituto del azúcar, ya que reduce los niveles de los triglicéridos. Si llevamos una dieta rica en carbohidratos y azúcares, incrementaremos los triglicéridos y estaremos en riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares y la diabetes tipo 2.
  • Calma los síntomas de la diarrea: La miel natural alivia la diarrea leve de manera rápida. Para consumirlo, mezcle una cuchara de miel con una bebida como el agua o en un té.

¿Cómo debo consumir la miel?

La miel se utiliza como edulcorante natural en reemplazo del azúcar, también para aliviar la tos y como un cicatrizante de las heridas. Los niños menores de 1 año no deberían consumirlo porque puede ocasionar afecciones gastrointestinales. También debes tener en cuenta si eres alérgica a los compuestos de la miel, como el polen. Debido a que pueden causar reacciones leves o mortales. Los síntomas que presentan son las náuseas, vómitos, arritmias, entre otros.

La miel contiene muchas propiedades que favorecen al organismo. Es preferible consumirlo de manera natural y no industrial, ya que pasa por un proceso de pasteurización en donde destruyen algunas de sus propiedades. Consumir en exceso la miel podría aportar un exceso de calorías, incrementando los niveles de azúcar en la sangre, por ello debes regular su consumo.

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