El eructo del bebé es un proceso importante, por ello los padres deben enseñarles a hacerlo para evitar la acumulación de gases dentro de su estómago. Es muy sencillo y solo necesitas hacerle expulsar todo el aire que han tragado duran el amamantamiento o cuando han llorado durante mucho tiempo. No realizarlo puede ocasionarle malestar.
¿Por qué es importante el eructo del bebé?
Los bebés consumen aire cuando comen, especialmente si es con un biberón. También, cuando están llorando, por ello si el menor lloró antes de comer es importante que lo expulse, así él podrá descansar y dormir relajado. Si el bebé no eructa, puede que no tenga nada para eructar, por ello no debes presionarlo.
Pero, si cuando está comiendo está muy inquieto es probable que no pueda expulsar el aire. Ante esta situación el bebé debe encontrarse en forma vertical, con la espalda recta y su estómago apoyado al pecho, le das suaves masajes. Es fundamental que el bebé eructe para que pueda eliminar los gases acumulados en su estómago y esto no le genere algún dolor en el abdomen o los cólicos.
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¿Cómo provocar el eructo del bebé?
Al inicio puede ser un poco complicado, sin embargo este proceso no le causa daño, al contrario evita que se desespere por el dolor o esté incómodo. Para realizarlo debes colocar una toalla al hombro para evitar mancharte, en caso regurgite. Colocas al bebé en una posición derecha apoyado ligeramente en tu hombro y frota suavemente su espalda. Debes tener paciencia, el eructo del bebé puede tomar algunos minutos.
En caso no eructe debes emplear otras técnicas, coloca al bebé sobre tus rodillas y agarra su cabeza con una mano y levanta sus brazos. Esto facilita la expulsión del aire. Si tu bebé se duerme después de comer déjalo descansar, cuando se levante él eructará. Aunque no existe un número adecuado de eructos, lo ideal es de unas 5 a 6 veces al día.
El eructo del bebé es importante hasta los 4 o 6 meses, durante el tiempo de la lactancia exclusiva. Después de ello el estómago poco a poco va madurando y ya no existe una necesidad obligatoria de hacerlo. Para poder reducir la ingesta de aire cuando consume el biberón debes seguir las siguientes recomendaciones:
- Comprueba la velocidad con la que sale la leche, no debe ser muy rápida.
- El biberón debe estar inclinado para que cuando succione esté lleno de leche y no entre el aire.
- Puedes emplear el biberón angular para disminuir el paso del aire.
Regurgitación, vómito y eructo del bebé
La mayoría de los bebés regurgitan antes de comer, especialmente al principio. Porque el estómago es pequeño y recién se está desarrollando. Cuando el bebé está lleno o lo cambias de una posición después de comer, la leche que se encuentra en su estómago puede subir por el esófago. Regurgitar y vomitar, son dos acciones diferentes, mientras que el vómito es una acción forzada por la boca para expulsar los contenidos del estómago.
El regurgitar es el fácil flujo de los contenidos en nuestro estómago, suele suceder después de eructar. Los bebés regurgitan a dos tomadas de leche sin tener algún dolor, es algo usual. Este proceso es diferente en cada bebé porque algunos lo realizan en mayor cantidad a comparación de otros. Generalmente, lo menores que consumen leche materna eructan menos que lo que consumen biberón, porque tragan menos aire. Algunas recomendaciones que debes tener en cuenta son los siguientes:
- Debes respetar los horarios de comida del menor, alimentarlo cuando tenga hambre disminuye las posibilidades que trague aire.
- La posición debe ser un poco vertical y debes mantener su cabeza por encima de su abdomen.
- Alimenta a tu hijo en un ambiente tranquilo para que se sienta cómodo y menos presionado.
El eructo del bebé es un proceso muy importante que debe realizarlo para evitar el ingreso de aire en su estómago y generarle dolor. Existe diferentes posiciones que le ayudan a un bebé a practicarlo, usa el más adecuado para el menor.
