Nuestra piel del rostro envejece inevitablemente, debido a la degradación de las células en nuestro organismo, lo que conlleva a que utilicemos diferentes cremas o sérums antiedad, para la prevención de las arrugas y cuidado del rostro. Los productos antienvejecimiento reducen la aparición de los signos de envejecimiento, favoreciendo una apariencia más jovial.
¿Qué es el antienvejecimiento?
El antienvejecimiento se encarga de buscar productos que prevengan nuestro envejecimiento celular, a través de investigaciones. Pero, para ello debemos saber cómo funcionan estás células. La fisiología de nuestras células cambia gradualmente, causando la disminución en la segregación del colágeno.
Este elemento se encuentra dentro de nuestros tejidos, siendo responsable de su estructura y mantenimiento. Por ello, la reducción del colágeno en la piel causa la flacidez y otros efectos. También influyen los factores externos e internos.
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¿Qué son las cremas antienvejecimiento?
Estas cremas generalmente son hidratantes para nuestra piel que poseen componentes activos los cuales benefician a nuestro rostro. Estos componentes se encargan de mejorar el tono de nuestra piel, su textura, las líneas finas, etc.
Todo esto se obtiene a través de los ácidos, que favorecen la síntesis de compuestos, como el colágeno y la elastina, los cuales son más eficientes en todos sus procesos. Son fáciles de aplicar dentro de nuestra rutina del cuidado de la piel, porque va después de la limpieza e hidratación.
¿Qué componentes posee las cremas antienvejecimiento?
Las cremas se encargan de suavizar la piel, reducir las líneas de expresión y arrugas. Los dos compuestos más comunes son los antioxidantes y los reguladores celulares. Ellos se encargan de favorecer el funcionamiento de nuestro sistema inmune y retrasar la muerte celular. A continuación, te mencionaremos otros componentes de estas cremas:
- Retinoides: Es el número uno de los ingredientes antiedad. El ácido retinoico, a través de los procesos que suceden en el núcleo de las células, modifican el funcionamiento y crecimiento de las células de la piel. También, reduce la formación de MMP, unas enzimas de la dermis que al activarse dañan el colágeno de la dermis. Además, ayudan en la regeneración de la epidermis y disminuir la pigmentación de la piel.
- Vitamina C: La vitamina C es un antioxidante que estimula la síntesis del colágeno, brinda luminosidad a la piel, reduce las manchas y rejuvenece el rostro. Su efecto antienvejecimiento se concentra entre el 5 a 15%. La acción despigmentante se obtiene al inhibir la creación de la melanina y al aclarar las manchas causadas por esta. Es preferible aplicarse por las mañanas junto con el bloqueador.
- Ácido hialurónico: El ácido hialurónico es un humectante e hidratante para nuestra piel. Se puede aplicar de forma tópica o con inyecciones, siendo este último el que combate la flacidez y devuelve el volumen perdido con la edad. Lo podemos encontrar en serums y cremas, se pueden aplicar en el día y en la noche.
- Ácido glicólico y otros hidroxiácidos: Los hidroxiácidos eliminan las células muertas de la epidermis y estimulan a las capas inferiores de la piel. El ácido salicílico es usado en pieles grasas y con acné. Mientras que el ácido glicólico exfolia la piel, la hidrata, estimula las síntesis del colágeno atenuando las arrugas, reduce la aparición del acné y de las manchas.
- Vitamina A: Es uno de los reguladores de células más empleado en la actualidad, debido a su efecto positivo sobre la creación del colágeno. También en contra de los signos del envejecimiento, como las líneas de expresión, la pérdida de la elasticidad, entre otros.
Conocer los componentes de las cremas antiedad nos ayuda a elegir mejor, por el tipo de piel, las necesidades o los efectos secundario que causan. También, a conocer los beneficios que nos brindan cada uno de ellos.