Las relaciones de pareja tienen momentos de felicidad y periodos de frustración. Cuando nos encontramos en momentos de crisis, solemos esperar que termine sin afectar la relación, pero pueden ser señales de que se necesita una terapia de pareja. Esta terapia te ayuda resolver conflictos o cambiar conductas dañinas en la relación.
¿Qué es la terapia de pareja?
Las terapias de pareja son psicoterapias para una pareja que siente que su relación se está desgastando o surgió alguna situación estresante que influye en la relación. Se analizan todos los conflictos y, dependiendo de estos, se adapta una psicoterapia, las cantidades de sesiones o la frecuencia.
Generalmente, las parejas acuden a una terapia cuando se encuentra al borde de una ruptura amorosa, ya que la relación se volvió monótona y no supieron manejar adecuadamente la comunicación, la confianza o el compromiso entre ellos.
Te puede interesar este artículo: Parejas: Doce factores distintos al amor para una relación exitosa
¿Cómo funcionan la terapia de pareja?
Primero, se realiza una evaluación para encontrar las conductas que afectan el desarrollo adecuado de la relación. Se realiza un acuerdo rapport o alianza terapéutica entre la pareja y el especialista para que se pueda llevar a cabo una terapia adecuada y se logren las metas establecidas.
¿Cuándo una pareja debe ir a terapia?
No existe un mejor momento o el más adecuado para acudir a una terapia. Puede ser cuando la pareja se encuentra en momentos difíciles o simplemente cuando están felices. En la terapia de pareja se centran en tratar conductas dañinas, mejorar la comunicación, expresar los sentimientos, ser tolerantes y respetar a la pareja, entre otros.
¿Cómo identificar que necesitan un tratamiento?
Algunos problemas de pareja suelen ser pasajeros y se resuelven con el tiempo, pero otros problemas o indicadores, como la infidelidad, los celos, las peleas constantes u otros, pueden generar una crisis o la separación de la pareja, donde se evidencian emociones negativas que dañan la relación. Algunos indicadores para tener en cuenta son las siguientes:
- No sientes amor por tu pareja: No te sientes valorado ni querido, no hay abrazos, contacto visual, ni otros pequeños actos de amor. La percepción sobre la pareja cambia.
- Tener problemas con el sexo: Los problemas constantes se resuelven con sexo. También, la libido de una persona puede ser mayor, sintiéndose rechazada por la pareja o presionada en la relación.
- No hay mucha comunicación en la pareja: La falta de comunicación es uno de los factores principales de los conflictos en la pareja. No se sienten escuchados, no expresan lo que sienten, tratan de resolver el conflicto sin escuchar o son desafiantes en la relación.
- Se culpan mutuamente: Cuando las peleas y el resentimiento son constantes, se vuelve más fácil culpar de todo a la pareja.
- Evitan el conflicto: Las discusiones suelen afectar de diferente manera a cada persona, por eso algunos lo evitan. Pero esto puede conllevar a resentimientos, infelicidad o incluso infidelidad.
- Un integrante piensa en tener una aventura: Si una persona de la relación piensa en el engaño, es momento de acudir con profesional. Puede ser pasajero, pero existen razones de su decisión. En una terapia se observan las debilidades de la persona que tomó la decisión, se fortalece la relación y se les enseña a comprenderse mutuamente
- Tienen momentos de crisis: Algunos sucesos, como el fallecimiento de un ser querido o la pérdida de un empleo, pueden conllevar a una crisis en la pareja. Una de las partes no se siente entendida y la otra no sabe cómo abordar el tema o ayudar, lo que causa una falta de comunicación entre la pareja y una posible rompimiento.
La terapia de pareja ayudan a mejorar la relación o simplemente a terminarla. Mantener una relación de pareja es complicada si no hay una comunicación adecuada, ya que no expresan su sentir teniendo conflictos constantes. Por eso, si sientes que la relación está en crisis, busca ayuda de profesionales con tu pareja para mejorar y superar el problema.
